Nacido en la Villa de Mazo en 1923, Enrique Fernández Caldas se licenció en Ciencias Químicas por la Universidad de San Fernando de La Laguna, y se doctoró en 1950 en la Complutense de Madrid.
Después de pasar un periodo de especialización en universidades extranjeras como Cambridge o Berkeley, fue nombrado director honorario del Centro de Edafología y Biología Aplicada de Tenerife, y en 1962 ingresó en el CSIC como investigador y profesor. También fue miembro destacado del British Council y del Instituto Internacional de EEUU.
Su etapa en la Universidad de San Fernando de La Laguna se inició como profesor agregado, hasta alcanzar la categoría de catedrático de Edafología y Química Agrícola, momento en el que se creó el Departamento de Edafología, del que formaron parte al principio el propio Fernández Caldas y sus primeros alumnos, Marisa Tejedor, José Manuel Hernández y Antonio Rodríguez Rodríguez. La labor de Fernández Caldas abrió entonces líneas de investigación que se mantienen vigentes en la actualidad.
Fue entonces cuando comenzó su trayectoria política, siendo procurador en las Cortes, miembro del Consejo Nacional de Educación y Consejero de Educación, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias de 1987 a 1989, cuando era Presidente su amigo y paisano Fernando Fernández.
Durante esta etapa le tocó lidiar con el conflicto universitario, en el que Fernández Caldas fue partidario de la existencia de dos centros complementarios. Fue rector de la Universidad de 1973 a 1976.
Enrique Fernández Caldas recibió muchos reconocimientos durante su vida.
En 2002 fue nombrado Hijo Predilecto de la Palma en sesión plenaria del Cabido Insular de La Palma, ocasión en la que afirmó lo siguiente: "la educación es la única empresa con la que vale la pena soñar".
Fuente: Juan Carlos Díaz Lorenzo, Enrique Fernández Caldas, in memorian (9.12.2013)
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