Según un artículo publicado en la revista británica The Lancet, la lactancia materna prolongada (más de un año) mejora el rendimiento escolar, aumenta el cociente intelectual en el adulto y se relaciona con unos ingresos altos en el futuro. El artículo informa del estudio llevado a cabo en la Universidad Federal de Pelotas (Brasil), que realizó un seguimiento de casi 3500 personas desde su nacimiento hasta que cumplieron 30 años, momento en que se sometieron a un test de inteligencia.
El equipo investigador dividió a los participantes en cinco grupos en función del tiempo que habían recibido la lactancia materna, y controlaron diez variables sociales y biológicas que pueden contribuir al incremento del cociente intelectual, tales como los ingresos familiares, el nivel de escolarización de los padres, la genética, la edad de la madre y si ha fumado durante el embarazo, el peso del bebé y el tipo de parto.
Los resultados de esta investigación arrojan la «primera evidencia» de que la lactancia materna mantenida durante más de doce meses influye de forma positiva en el desarrollo cognitivo. Los autores del estudio explicaron que la leche materna tiene una composición altamente beneficiosa para el lactante, y en ella destacan los ácidos grasos de cadena larga (DHA), «esenciales para el desarrollo cerebral». El investigador principal, Bernardo Lessa Horta, comentó a este respecto que «el efecto de la lactancia materna prolongada influye en el desarrollo cerebral y la inteligencia de los niños, pero estos efectos persisten también en la edad adulta».
El equipo investigador dividió a los participantes en cinco grupos en función del tiempo que habían recibido la lactancia materna, y controlaron diez variables sociales y biológicas que pueden contribuir al incremento del cociente intelectual, tales como los ingresos familiares, el nivel de escolarización de los padres, la genética, la edad de la madre y si ha fumado durante el embarazo, el peso del bebé y el tipo de parto.
El profesor Erik Mortensen de la Universidad de Copenhague matiza los resultados del estudio, ya que «con la edad, los efectos del desarrollo temprano pueden diluirse debido a factores ambientales posteriores, o mejorar como consecuencia de los logros educativos o profesionales». Mortensen subraya sin embargo que este estudio «sugiere que los efectos de la lactancia materna prolongada en el desarrollo cognitivo persisten en el adulto y son importantes para la salud».
Esta investigación viene a sumarse a una corriente de estudios que tratan de demostrar los múltiples beneficios de la lactancia materna, beneficios de carácter biológico (mejor sistema inmune) y psicológico (mayor seguridad y afecto) que redundan en una mejor salud para el lactante y el futuro adulto, pero también para la madre (la lactancia previene la anemia, la hipertensión o la depresión posparto).
Esta investigación viene a sumarse a una corriente de estudios que tratan de demostrar los múltiples beneficios de la lactancia materna, beneficios de carácter biológico (mejor sistema inmune) y psicológico (mayor seguridad y afecto) que redundan en una mejor salud para el lactante y el futuro adulto, pero también para la madre (la lactancia previene la anemia, la hipertensión o la depresión posparto).
Fuentes: La lactancia materna prolonga aumenta el coeficiente intelectual a largo plazo (El mundo, 18.03.2015)
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