miércoles, 8 de abril de 2015

Manzanas y patatas transgénicas que no se oxidan

El mercado estadounidense podrá disfrutar en breve de nuevas variedades de manzanas y patatas transgénicas, toda vez que la Food and Drug Administration (FDA) de los Estados Unidos ha evaluado estas nuevas manzanas y papas modificadas genéticamente y ha concluido que son seguras y tan nutritivas como las variedades tradicionales. 

Las nuevas variedades Granny Smith y Golden Delicious, conocidas popularmente como manzanas árticas, presentan una innegable ventaja respecto al resto: la pulpa no adquiere esa coloración parda tan característica cuando, una vez cortadas en rodajas, las exponemos al aire libre un par de horas. La causa de este fenómeno común son unas enzimas llamadas polifenol-oxidasas, encargadas de oxidar los polifenoles. Una pequeña firma de agricultura biotecnológica, Okanagan Speciality Fruits, ha descubierto la manera de reducir la actividad de esas enzimas para impedir que las manzanas se tiñan de color marrón por efecto de la oxidación. 


Por su parte, las nuevas variedades de patatas Ranger Russet, Russet Burbank y Atlantic de Simplot, diseñadas por la J. R. Simplot Company y conocidas como papas innatas, están diseñadas, además de para reducir la actividad oxidante de las enzimas del mismo modo que las manzanas árticas, para producir menos cantidad de acrilamida, una sustancia que se forma durante la cocción a altas temperaturas y «clasificada por la IARC como "sustancia probablemente carcinogénica en humanos" debido a serios indicios a partir de resultados realizados en mamíferos y líneas celulares humanas.» (Morales y Rufián, p. 14). La acrilamida es un compuesto orgánico que surge al freír las papas y que lleva muchos años preocupando a las autoridades sanitarias de los países occidentales.

Fuentes: 

No hay comentarios:

Publicar un comentario